En la actualidad, las muelas del juicio, también conocidas como terceros molares, son las últimas muelas en desarrollarse y suelen erupcionar entre los 17 y 25 años.

Sin embargo, las muelas del juicio a menudo presentan problemas debido a la falta de espacio en la mandíbula, lo que puede dar lugar a complicaciones como:

1. Impactación: Las muelas del juicio pueden quedar atrapadas debajo de las encías y no erupcionar completamente. Esto puede causar dolor, inflamación y dificultad para limpiar adecuadamente la zona, lo que aumenta el riesgo de infección y enfermedad periodontal.


2. Apiñamiento dental: Cuando las muelas del juicio intentan salir pero no hay suficiente espacio en la boca, pueden empujar o desplazar los dientes adyacentes, causando apiñamiento dental y problemas de oclusión.


3. Caries y enfermedades periodontales: Debido a su ubicación al final de la arcada dental, las muelas del juicio son más difíciles de alcanzar y limpiar correctamente. Esto aumenta el riesgo de caries y enfermedades periodontales en estas áreas.

Dada la alta incidencia de complicaciones asociadas con las muelas del juicio, se recomienda su extracción preventiva en aquellos casos en los que se prevé que puedan causar problemas a largo plazo. Esta extracción preventiva se realiza generalmente en una etapa temprana, antes de que las muelas del juicio hayan erupcionado completamente.

No obstante, cada caso es único, y la necesidad de extraer las muelas del juicio dependerá de varios factores, como la posición, la salud oral del paciente y la existencia de síntomas o complicaciones.